Hay ocasiones que llega el día. Ese día que no querías o creías que llegaría.
Has estado eufóricx, cansadx, irritadx, estresadx, depecionadx, agotadx…
Has leído libros de gestión del tiempo, de productividad, de hábitos, de gente exitosa, de gestión de estrés…
Has ido a acupuntura, retiros, a yoga, al camino de Santiago..
Has escuchado podcast sobre cómo se sienten otros, sobre relaciones laborales, emprendimiento, sobre volver a empezar…
Has hablado con amigos, pareja, compañeros de trabajo… incluso ya has ido a terapia alguna vez.
Pero llega un día que se derrumba todo y no puedes más. Has estado buscando respuestas fuera, quieres que alguien te diga qué hacer para sentirte mejor en ese entorno pero ya no puedes más. Puede que físicamente estés agotado, pero te duele más el agotamiento emocional y mental. ¿Esto va a ser siempre así? ¿Cómo he llegado hasta aquí? o peor aún ¿Cómo salgo de este lugar en el que no me siento bien?
El mundo moderno nos impone una constante presión para buscar el éxito y alcanzar nuestros objetivos. Sin embargo, esta búsqueda ininterrumpida puede tener un efecto negativo en nuestra salud mental y emocional. El burnout, o síndrome del trabajador quemado, se ha convertido en una preocupación creciente en la sociedad actual. En este artículo, exploraremos de nuevo en profundidad qué es el burnout, sus causas, síntomas y proporcionaremos estrategias eficaces para combatirlo.
¿Qué es el Burnout?
El burnout es un estado de agotamiento físico, mental y emocional causado por el estrés crónico relacionado con el trabajo. Afecta a personas de diferentes profesiones y niveles jerárquicos. Aunque está demostrado que las profesiones más propicias al Burnout son aquellas de vocación y dedicadas a las personas. El trabajador quemado experimenta una sensación de desgaste y agotamiento, lo que afecta negativamente su rendimiento laboral y su calidad de vida generando un momento como yo digo de “no poder más”.
El burnout o síndrome del empleado quemado está considerado por la OMS enfermedad laboral, y surge tras un periodo en general largo y continuado (por ello se llama síndrome, por su condición de proceso) en el que has estado en modo lucha, en estrés crónico, buscando respuestas que no encuentras.
Si estás en esa situación, te pregunto sobre los últimos años:
⇒ ¿Cómo ha estado tu autoestima y tu autovaloración en el trabajo?
⇒ ¿Cuántas veces has puesto el foco en ti, en lo que tu necesitas?
⇒ ¿Cómo has ido de salud y descanso?
Causas del Burnout
El burnout puede ser resultado de una combinación de factores relacionados con el trabajo, el entorno laboral, nuestra personalidad y nuestros hábitos. Algunas de las causas más comunes incluyen:
- Sobrecarga de trabajo: Una carga excesiva y constante de tareas puede llevar a una sensación de abrumadora presión. Nunca nos sentimos satisfechos ya que el trabajo nunca está realizado.
- Falta de control: La falta de autonomía y control sobre el trabajo genera frustración y desmotivación. Si no hay flexibilidad en algunos tramos de la cadena de valor en los que siento que podría realizarse un mejor trabajo, me puedo sentir estresado e impotente.
- Ambiente laboral tóxico: Relaciones negativas con compañeros, jefes o clientes pueden contribuir al desarrollo del burnout. En el mapa del estrés hablamos de personas agresivas en nuestro entorno de trabajo.
- Falta de reconocimiento: La falta de apreciación y reconocimiento por el trabajo bien hecho o realizado puede minar la motivación y la satisfacción laboral.
Síntomas y signos del Burnout
Los síntomas y signos del burnout pueden manifestarse tanto a nivel físico como emocional. Algunos síntomas comunes incluyen:
- Fatiga constante y agotamiento físico.
- Problemas de la piel como caspa o psoriasis.
- Dificultad para concentrarse y falta de motivación.
- Problemas estomacales.
- Insomnio y trastornos del sueño.
- Irritabilidad y cambios de humor.
- Aislamiento social y pérdida de interés en actividades antes disfrutadas.
Estrategias para Combatir el Burnout
Si te identificas con este estado general y tienes varios de estos síntomas, es importante tomar medidas. Es momento de parar totalmente y en seco. De dejar de buscar. Es momento simplemente de descansar y dejar la mente, no somos nuestro cerebro, no tenemos que racionalizar todo y encontrar respuestas ni etiquetas. Ni si quiera se trata de encontrar un diagnóstico y decir: “Ahora sé qué me pasa, estoy en Burnout y ahora tengo que seguir x pasos”, pero si que te comento algunas de las estrategias que puedes empezar a implantar:
Para y reflexiona
Como acabo de mencionar lo mejor es descansar y buscar espacios para la reflexión. No es época de tomar decisiones importantes hasta que no encontremos claridad y mayor bienestar.
Establece límites claros
Aprende a decir “no” cuando sea necesario y establece límites en tu trabajo y vida personal para evitar sobrecargas innecesarias. Es momento de priorizarte.
Busca apoyo
Habla con alguien cercano sobre tus sentimientos y busca el apoyo de amigos, familiares o incluso de un profesional como un psicólogo, médico, psiquiatra o coach especializado y que te de confianza. Liberar nuestras emociones y encontrar similitudes con otros nos ayuda enormemente. Somos seres sociales.
Practica el autocuidado
Dedica tiempo a actividades que te ayuden a relajarte y rejuvenecer, como hacer ejercicio, practicar la meditación, disfrutar de tus hobbies o cosas más pequeñas que te aporten bienestar. ¿Sabes qué pequeñas cosas te producen satisfacción?
Establece metas realistas
Aprende a establecer metas alcanzables y a priorizar tus tareas diarias para evitar sentirte abrumado. Recuerda que este camino es contigo mismo, no hay que competir con nadie más, por lo que en el caso de que estés preparado para cumplir con algún pequeño objetivo, que sea “fácil” y SMART, no es momento de grandes retos. Es momento de recuperar la energía y el vigor.
Conclusiones
El burnout es un problema que afecta a muchas personas en la actualidad. Sin embargo, existen estrategias efectivas para combatirlo la primera de ellas para en seco y buscar espacios de descanso.
Recuerda que tu salud mental y emocional es más importante que tu éxito profesional. Priorizar tu bienestar te permitirá mejorar tu rendimiento laboral y disfrutar de una vida más equilibrada y satisfactoria.
Ten paciencia y trata de no tomar acciones drásticas hasta que puedas tomar las decisiones acertadas y tu mente esté en calma.
Si necesitas algo, me tienes a tu disposición a un click.
Abrazos mil
Lidia Moma.