Estrés… ¿adaptativo?

El otro día me preguntaban sobre qué es exactamente el estrés no adaptativo.

El cuerpo humano es extraordirario, quiero tener siempre esa creencia porque me aporta y la creo. Aunque estemos pasando por procesos de enfermedad o el cuerpo nos juegue alguna mala pasada, yo creo que lo es, es Amazing :).

Hay un #estrés adaptativo que nos ayuda, en ese momento nos potencia y puede marcar la diferencia entre vivir o morir.

Ese tipo de “estrés” extraordinario que hace que nuestro cuerpo ponga foco en esa actividad que cree urgente, que potencie nuestro físico con el fin de superar un obstáculo, que afronte un mayor gasto de energía, que lleve sangre a las áreas dónde se necesitan ese momento… y otras funciones (en este post describo más explícitamente algunas funciones corporales del estrés según la neurociencia, post estrés ), es decir, que apueste por ser ganador de una batalla que se libra “a muerte”.

Por ejemplo si nos va a atropellar un coche, no vamos a estar pendientes del color o de si es el último modelo de la marca tal, nuestro cerebro no va a ir a la corteza prefrontal para usar/recordar esas funcionalidades en un momento que no toca, sino que activa otros diversos mecanismos para correr lo más rápido que podamos (Modo lucha o huída). Se dice que es positivo (aunque hay expertos que dicen que ningún estrés es positivo en sí) porque en nuestro día a día también se activa para darnos vidilla ante retos u objetivos, por ejemplo esas veces que nos ponemos nerviosos ante algo que queremos hacer (el miedo surge ante posibles peligros como que nos rechacen si hacemos mal una reunión ect), aunque cuanto más habilidades y capacidades tenemos a nivel metacognición (ser muy conscientes de lo que está pasando en cada momento) menos se originarán cambios físicos en nuestro organismo.

Hay varios vídeos sobre esta capacidad casi “sobrehumana” de nuestro cuerpo, con casos reales de personas que han sobrevivido a una gran caía, que han levantado pesos que seríamos incapaces de levantar ante condiciones normales o que han acelerado al correr de manera increíble. Bastante asombrosos y curiosos. Te dejo el enlace aquí Cuerpo Humano al Límite La Fuerza.

Por lo tanto, Yo sí que quiero este mecanismo en mi cuerpo, por supuesto, pero cuando sea necesario, cuando suceda algo que atente contra mi vida, pero no cuando no estoy en peligro real, no cuando por ejemplo tengo que hablar en una reunión o acto público (el 75% de la población tiene miedo a ello), ya que en nuestra era en general y en nuestro entorno no estamos luchando por sobrevivir a nivel físico.

No quiero vivir en la supervivencia en sí, pensando que un peligro (León, otra persona o enfermedad me da igual) me acecha, sino vivir con mayor plenitud, calma y amor.

El problema es cuando ese mecanismo tan útil se vuelve crónico (intenso y duradero), utilizándolo tanto que ya no dejamos que el cuerpo se regenere ante todo ese esfuerzo, ese cócktel de químicos y hormonas, de bajadas de dopamina y serotonina, y subidas de cortisol y adrenalina… lo que trae diferentes desequilibrios que pueden ocasionar molestias en principio y enfermedades posteriormente. Es cuando aparece el estrés no adaptaivo.

El no adaptativo o Distrés es, por tanto, aquel que “sufrimos” cuando no es necesario ese sobre-esfuerzo físico y psíquico, y surge ante una situación que no es real o está basada en expectativas/ creencias de un posible escenario negativo o terrible para nosotros, para nuestro cerebro. Por ejemplo cuando estamos preocupados en exceso por una reunión pensando que no sabemos algo o que no hemos alcanzado los objetivos de ventas y por lo tanto creemos que nos van a despedir. Realmente sabemos que nos van a despedir? realmente tienes que saber todo o vender siempre por encima de lo marcado?

Cuando el estrés se cronifica a nuestro cuerpo no le da tiempo a recuperarse de todas las hormonas segregadas (como cortisol o adrenalina) y nuestro cuerpo y energía se agotan ante tanto esfuerzo. Mantenido en el tiempo podemos llegar a padecer Burnout (“quemarnos”) o agotamiento emocional, mental y físico, ya reconocido por la OMS como Enfermedad y motivo cada vez mayor de Baja laboral y de grandes pérdidas humanas y económicas.

Es un indicio de que algo no anda bien en nuestras empresas, escuelas, entornos o sociedad, y también, en nosotros mismos, ya que la responsabilidad para mí recae en primera instancia en nosotros mismos que necesitamos aprender a vivir la vida que queremos vivir, poner límites y detectar cuando nuestro cuerpo se empieza a resentir ante determinada situación insostenible para nosotros en ese momento.

Momento de pedir ayuda, de contar lo que nos pasa, de conseguir otros puntos de vista para organizarnos mejor, cambiar de pensamientos o en el peor de los casos realizar un plan de acción para cambiar de entorno profesional/ personal.

Hay un video de Walt Disney bastante antiguo que para mi lo explica a la perfección! Puedes encontrarlo fácilmente en google con el nombre Estrés según Walt Disney.

Por lo tanto como seres humanos que somos, podemos elegir saber y entender como funcionamos para poder vivir más en estado de Flow (Fluir) y menos en estado de supervivencia, más en Confianza por nosotros y la vida o en miedo constante.

Confiar sabiendo que cuando sea necesario nuestro cuerpo ya actuará como sabe hacerlo en momentos críticos. Tanto por nosotros como por los nuestros. Pero mientras tanto disfrutar de nuestro paso por la vida lo máximo que podamos, eliminando lo que ya no nos sirve y mejorándonos día a día.

Y tú, Qué eliges? Vivir o sobrevivir?

Feliz vida

PD: Libro recomendado sobre estrés y resiliencia (Capacidad de adaptación al estrés) → Los secretos de la resiliencia